CUANDO NO SE PUEDE SOÑAR.

Llegó una tarde aquel individuo, con barba crecida y mirada torva. Llevaba un costal a la espalda. Y recorría el pueblo mirándolo todo de mala manera. La gente del pueblo pensó: -Es una mala persona que viene a robarnos. Y el alcalde fue y le dijo: -O se marcha del pueblo o le damos una paliza. El individuo aquel era un hechicero. A las afueras del pueblo quemó unas plumas de cuervo y unos pelos de gato, y luego espació las cenizas diciendo: -¡Que los niños de ese pueblo no puedan soñar! Después el hechicero se marcho por el mundo adelante. Aquella noche ningún niño del pueblo pudo dormir ni soñar. Tampoco la siguiente noche. Los niños pasaban las noches sin soñar. Y lo que era peor, tampoco soñaban de día. Cuando no se sueña, el mundo comienza a ir mal. Se han perdido las utopías, dicen los filósofos. Porque soñar es imaginarse que las cosas feas pueden ser lindas. Si yo veo la calle llena de potes de refresco y cerveza, y sueño con la calle limpia, comenzaré por botar las latas en los pipotes. Y la calle quedará limpia.Pero si no sueño con una calle aseada, nunca haré nada por limpiarla. Y eso s lo que comenzó a pasar en aquel pueblo. Los niños no soñaban y el pueblo estaba cada vez peor. Los abuelos, los papás, los tíos, los hermanos mayores comenzaron a preocuparse. Los niños no sueñan, caminan atontados ¿Qué va a ser del pueblo? Se reunieron las personas mayores y deliberaron: -¿Qué hacemos para que los niños vuelvan a soñar? La culpa la tuvo aquel hechicero que nos maldijo. Hay que lograr que los niños vuelvan a soñar. Alguien dijo: -Yo conozco a un santo religioso, de hábito castaño. Se llama francisco. El Quizás sepa hacer soñar a los niños. Lo fueron a buscar. Y llego el pobrecillo Francisco, con su paz de corazón, con su sonrisa, con su guitarra. Y dijo. -Pronto, que vengan los niños conmigo al país de la fantasía. Allí aprenderán a soñar. Y Francisco cantó: “Señor, haz de mi un instrumento de tu paz. Donde haya tinieblas, que yo ponga luz, donde haya tristeza, que yo ponga la alegría”. Y los niños comenzaron a conseguir a francisco, mientras éste caminaba y cantaba con su guitarra. Y así llegaron al país de la fantasía. Todo era fantástico. El gato no cazaba ratones, sino que jugaba con ellos como buenos amigos. El lobo le hacía cosquillas al cordero de blanca lana que se revolcaba en la hierba. Y un niño jugaba con una enorme serpiente, pasándole la mano por el lomo. Después de contemplar un rato aquel mundo fantástico. Francisco les dijo: -Ya aprendieron soñar. Pero no basta. Ahora hay que aprender a realizar los sueños, a construir la paz. Canten conmigo. Sonó la guitarra de Francisco: -Donde haya discordia, que yo ponga unión. Donde haya ofensa, que yo ponga perdón. Donde haya odio, que yo ponga amor. Los niños aprendieron la tonada, la cantaban y la ponían en práctica. La gente se saludaba y se deseaban la paz; nadie andaba triste ni se hacían daño unos a otros, y todo era alegría. En la plaza del pueblo la gente rompía las armas de guerra, las pistolas, las metralletas, las bombas atómicas. Y con las piezas sueltas de las armas rotas, construían herramientas de trabajo y juguetes para los niños. ¡Qué hermoso era soñar y vivir! Francisco de Asís les dijo: -Me tengo que ir con mi guitarra al cielo para cantar con el coro de los serafines. Pero ustedes continúen viviendo en el país de la fantasía, soñando con un mundo sin guerra y en paz. Vayan cantando por la vida, el mayor y el perdón. -Francisco desapareció. Y desde entonces en aquel pueblo los niños nunca dejaron de soñar y de construir la paz. Colorín, colorado…. Tomado del libro “Con ojos de niños” de Carlos Bazarra.

Anisos ante la coyuntura

ANISOS es una Asociación Civil sin fines de lucro orientada a dictar promover acciones educativas lúdicas con perspectiva de Derechos humanos y siempre buscando la preeminencia de valores como tolerancia, respeto, solidaridad, cultura de paz y los Derechos Humanos. Febrero de 2014 ha resultado ser un mes de conflictividad social y política, vemos con preocupación los niveles de intolerancia, violencia y conflictos que se están evidenciando en nuestro país. Es por ello que RECHAZAMOS ENÉRGICAMENTE: 1. Todo tipo de violencia proveniente tanto de ciudadanas y ciudadanos, como de representantes de organismos policiales y militares. 2. El uso con fines proselitista de niños, niñas y adolescentes. 3. Toda protesta que se ejerza de manera no pacifica y que menoscabe el derecho otras personas. 4. La asistencia de niños, niñas y adolescentes en manifestaciones públicas donde puedan resultar maltratados. 5. El uso de sustancias toxicas y químicas (granadas lacrimógenas) para repeler manifestaciones. Al igual rechazamos la quema de materiales inflamables y desechos sólidos. 6. Generar cualquier tipo de lesión o daño a animales y plantas. Hemos sido promotoras de la cultura de paz, principalmente de niñas, niños y adolescente y personas víctimas de cualquier tipo de violencia. Por tal motivo nos preocupa la especial vulnerabilidad de niños, niñas y adolescentes en los momentos actuales. Por tal motivo RECOMENDAMOS: 1. Explicar de forma neutral y clara la situación que atraviesa Venezuela. Sin favorecer ninguna polaridad política. 2. Alejar a niños, niñas y adolescentes de cualquier manifestación o concentración política. 3. Reflexionar junto con niños, niñas y adolescentes conceptos como paz, tolerancia, Derechos Humanos; además del significado de la Constitución nacional de la Republica Bolivariana de Venezuela; además de la Ley Orgánica para la Protección de Niñas, Niños y adolescentes. 4. Promover actividades lúdicas recreativas y didácticas que promuevan la creatividad de niños, niñas y adolescentes. Resaltar el papel fundamental de las manifestaciones y concentraciones pacificas y creativas como forma de reivindicación de Derechos humanos. 5. Promover la asistencia a las mascotas afectadas por gases tóxicos y sustancias perjudiciales. Además debe procurar su posterior asistencia médica veterinaria. Finalmente, apelamos a la implementación en nuestras vidas diarias de una real cultura de paz y promoción de Derechos Humanos. Vacúnate en contra de la violencia!